Hace un tiempo escribía un artículo titulado La familia nuclear, un invento occidental.
Esta familia nuclear, más que un invento occidental, diría que se trata de un invento moderno. Un invento que va de la mano y está al servicio de la (re)producción capialista. Ni más ni menos.
Los burgueses cortaron el molde y las distintas capas sociales, con más o menos incomodidades, intentaron adaptarse al esquema mamá+papá+hijos (si pueden ser dos y si pueden ser niño y niña entonces ya, pleno al 15).
No me cansaré de repetir, sin duda, que este esquema a hecho infeliz a mucha gente. Como leía hace poco en una entrevista a S. Federici, "la familia nunca ha sido un lugar de serenidad". Ha sido el centro de desigualdades y sumisiones de la mujer, por supuesto y, aunque se diga menos, también de los hij@s.
Como consecuencia de todo ello hoy en día tengo la impresión que la palabra familia (a secas) está muy denosatada en según que círculos y se asocia irremediablemente con este modelo tan nocivo.
Así pues, hoy no pienso hacer ningún alegato en favor de la familia. Ni pensarlo. De hecho he decidido desde ya mismo dejar de usar esta palabra.
¡Familia caca!
Usaré un acrónimo, ala, que están de moda.
Unidad Básica de Reproducción Social (UBRS).
Porque quiero hacer aquí, eso sí, una defensa de la UBRS.
Decía Levi-Strauss que en todo grupo humano existe una primera unidad de reprducción social donde los miembros cuidan unos de los otros y es, el primer sitio de socialización de los niños.
En esta UBRS empieza el diálogo. Empieza la empatía. Cada uno de sus miembros aprende a respetar y respetarse.
Es en la UBRS donde los niños tiene el primer contacto con la sociedad y
sus aprendizajes son fundamentales para la reproducción social.
Nuestra UBRS particular, cuenta, de momento, con 4 miembros. Dos adultos y dos menores. La relación que nos une se basa, básicamente, en el amor y el compromiso.
Los dos adultos tenemos un proyecto común al que hemos querido añadir dos compañeritas de viaje.
Nuestra idea es intentar que cada uno de nosotros sea lo más feliz que nos sea posible. Siempre poniendo por delante las necesidades de los que, por ahora, son los miembros más vulnerables, las pequeñas.
Creemos que creando un cilma de respeto y amor podemos conseguir que cada uno de nosotros se sienta realizada como persona individual y aprenda, también, a desarrollarse en grupo (diálogo, compromiso, tolerancia, etc).
Intentamos crear un espacio de convivencia y creación en nuestro hogar, donde todos los integrantes nos sintamos queridos, escuchados y podamos desarrollar nuestra personalidad, siendo conscientes de nuestras limitaciones, mochilas y sombras.
Siendo conscientes que para que todo esto funcione, tambień hay que dar, hay que comrometerse y renunciar a ciertas cosas. Sobretodo en el mundo en que vivimos.
Siendo conscientes que para que todo esto funcione, tambień hay que dar, hay que comrometerse y renunciar a ciertas cosas. Sobretodo en el mundo en que vivimos.
Porque la sociedad sigue teniendo como eje la producción y eso dificulta las cosas.
Porque el molde de familia burguesa nuclear donde papá y mamá trabajan mucho y los hijos van muchas horas a la escuela sigue muy pero que muy vigente.
Este es nuestro proyecto de UBRS, pero hay otros mucho más originales y creativos, los hay con miembros del mismo sexo, otros sin hijos pero llenos de gente...
Yo de hecho he vivido en diferentes tipos de UBRS, uno extenso (con abuelos, tías, madre, etc) otro con dos miembros (mi madre y yo), etc...
¿Cuál es el vuestro?
Para terminar, os dejo un video bastante inspirador y cortito del espacio feminista de la Tuerka. El Tornillo y la familia. A ver que os parece.
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