En una charla a la que pude asistir hace unos días, Rebeca Madrazo, doula y terapeuta dejó caer una afirmación que me hizo pensar. Quería compartirla con vosotras y ampliarla.
Cada vez hay más parejas que a pesar de no tener ningún problema físico concreto no se pueden quedar embarazadas.
Añado,
Cada vez hay más mujeres que, a pesar de no tener ningún problema físico concreto, sufren partos interminables. Empiezan las contracciones con normalidad y de golpe, paran. No dilatan, no se contraen...
Otra cara de la misma moneda: cada vez hay más mujeres que sienten como desagradable dar el pecho. Mujeres que no tiene grietas, el niño se engancha sin problema, pero a ellas les duele, les molesta de manera casi insoportable. Se les adjudica la etiqueta de pezón hipersensible.
Hace tiempo que me pregunto que pasa con nuestros cuerpos.
No soy militante de naturalizar nuestras maternidades, entiendo que buena parte de nosotros, casi todo, viene dado por la cultura.
Pero cuidado con desconetarnos hasta el extremo de nuestros cuerpos.
Fotografía de la serie "A beatiful body" |
¿Tal vez todo debería empezar con una sexualidad más saneada?
Porque entiendo que el primer escalón para conocer nuestros cuerpos y prepararlos para dar vida, viene dado por entender sus querencías y placeres.
Pienso que estamos construyendo muros, miedos que se edifican y a medida que avanza la vida, nos desconocemos.
¿Decrecemos?
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